Los británicos, que este verano celebran una fiesta en España, han sido advertidos de que se enfrentarán a una plaga de mosquitos, cucarachas e insectos este verano.
Los turistas han advertido que se enfrentarán a la peor ola de calor en 20 años cuando alcance los 43 grados centígrados, la peor en 20 años, provocando incendios forestales y enjambres de insectos.
El grupo ecologista español ANECPLA dice que el calentamiento que sigue a las fuertes lluvias proporciona un entorno propicio para que los insectos se reproduzcan «a la velocidad del rayo».
Dicen que el problema se exacerbó durante el período del gobierno cuando los consejos dejaron de bloquear campañas debido a los costos y la escasez de mano de obra.
“Se espera que este verano sea peor de lo habitual”, dijo George Calvan, director general de ANECPLA.
“Las temperaturas extremas de los últimos días y las próximas estaciones, junto con las lluvias primaverales, son la tormenta perfecta para que mosquitos, cucarachas, garrapatas, avispas e insectos crezcan a la velocidad del rayo”.
La Asociación Nacional de Organizaciones de Salud Ambiental hizo un llamado a los consejos para que tomen medidas.
El líder del grupo, Sergio Monge, dijo: Hasta hace poco teníamos enfermedades muy foráneas en España.
«Sin embargo, ya hemos comenzado a experimentar brotes importantes, como la enfermedad de Lyme o la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo, transmitida por garrapatas».
Según la Organización Mundial de la Salud, las enfermedades transmitidas por mordeduras causan actualmente más de 700.000 muertes en todo el mundo cada año.
La mayoría de ellos son capaces de transmitir enfermedades peligrosas como la malaria, el zika, el dengue o el chikungunya debido a las picaduras de mosquitos.
A pesar de su pequeño tamaño, los insectos son considerados los animales más mortíferos del planeta.
Ocho personas han muerto en España desde el brote de fiebre del Nilo Occidental en 2020.
Casi 50,000 acres de tierra han sido devastados por un reciente incendio forestal en las montañas de la Sierra de la Culebra.
Mientras unos 500 bomberos luchaban por apagar el fuego que se desplazaba rápidamente, las autoridades locales emitieron órdenes de evacuación a 11 pueblos de la zona.