Se prevé la pérdida de unos 300.000 puestos de trabajo más en España en 2021, lo que afecta principalmente a las pequeñas empresas, en un nuevo golpe a la ya sobrecargada economía, como ha advertido la Asociación de Trabajadores Autónomos de España (ATA). EURACTIV EuroEFE Partner Report.
Desde el inicio de la epidemia en marzo-abril de 2020, el sector ha perdido más de 70.000 millones de euros, debido al impacto de las restricciones puestas en marcha para contener la propagación del virus, según el informe. El último barómetro Recientemente fue publicado por ATA.
Alrededor del 82% de los empresarios autónomos en España reportaron una disminución significativa en su facturación en comparación con 2019, mientras que el 61,8% dijo que la disminución en el volumen de negocios superó el 60%.
Esquemas de desmovilización como «bote de rescate»
Según el informe de la ATA, el 41% de los empresarios autónomos han tenido que despedir a parte de su plantilla como consecuencia de la crisis económica provocada por la pandemia.
Sin embargo, la «buena noticia» es que hasta el momento, solo el 7,3% de los autónomos españoles tiene previsto solicitar un plan de despido temporal a corto y medio plazo este año.
Entre otras medidas excepcionales, el gobierno español ha puesto en marcha un ambicioso programa desde abril de 2020 para salvar miles de puestos de trabajo en riesgo por las consecuencias de la pandemia, gracias principalmente a planes de despido temporal (Expedientes de Regulación Temporal de Empleo, o ERTE de España). ), que actualmente afectan a unos 800.000 trabajadores.
Los beneficiarios de los programas ERTE se consideran oficialmente empleados, lo que significa que no se cuentan como desempleados. Con la tasa de desempleo en España alcanzando el 16,13% en 2020, los analistas lo describieron como el «peor año» para el empleo en España desde 2012.
Bajo el esquema ERTE, el estado español otorga a los trabajadores alrededor del 70% de sus salarios y prohíbe a las empresas despedir a personas. El Ministerio de Trabajo del país dijo que en caso de fraude o despidos, las empresas deben restablecer las exenciones de las contribuciones al sistema de seguridad social o arriesgarse a recibir sanciones severas.
Sin embargo, los elevados gastos que deben cubrir los emprendedores autónomos para el desarrollo de su actividad supusieron la pérdida de muchos puestos de trabajo o ERTE en 2020, tal y como recoge el informe ATA.
Los salarios y las cotizaciones sociales se encuentran entre los principales costes fijos que han obstaculizado el mantenimiento de la plantilla de estos emprendedores.
Cerrar empresas
Entre los principales problemas a los que se enfrentan los pequeños y medianos empresarios españoles se encuentran las severas restricciones que impone la epidemia, entre ellos los toques de queda nocturnos y las restricciones a la circulación, que han obligado a la mayoría de ellos a cerrar sus negocios.
Actualmente, según un informe de la ATA, dos de cada tres trabajadores autónomos todavía enfrentan algún tipo de restricciones que afectan a sus negocios.
Entre la multitud de problemas económicos agravados por la pandemia se encuentran los pagos atrasados a los proveedores de servicios, la mayoría de los cuales son trabajadores independientes. Según el informe, uno de cada tres trabajadores autónomos se ve afectado por esto, tanto en empresas públicas como privadas.
[Edited by Zoran Radosavljevic]